Sin embargo, este poder solo te beneficia si sabes cómo usarlo. El mercado eléctrico de Texas ofrece muchas opciones, y encontrar la adecuada para ti depende de mucho más que una tarifa baja anunciada. En esta guía, te explicaremos qué buscar, cómo comparar planes y cómo evitar errores comunes al elegir.
Antes de comparar planes, conviene comprender cómo consume la electricidad su hogar a lo largo del año. Su factura mensual o su historial de consumo son el mejor punto de partida.
Buscar:
Su consumo promedio de kilovatios-hora (kWh) cada mes
Patrones estacionales (por ejemplo, mayor uso durante veranos calurosos o olas de frío)
Momentos del día en que su uso alcanza su pico máximo, especialmente si está considerando un plan de uso por horario
Los planes suelen tener precios por niveles según el nivel de uso. Conocer el consumo típico de tu hogar te ayudará a encontrar un plan que se ajuste a tus necesidades, sin sorpresas.
Muchos planes de electricidad promocionan una tarifa que solo aplica bajo ciertas condiciones. En lugar de basarse en la cifra principal, tómese su tiempo para comprender la estructura completa de precios.
Esto es lo que debes comprobar:
Este documento obligatorio muestra los costos reales del plan, incluidos:
Precio por kWh en diferentes niveles de uso (normalmente 500, 1000 y 2000 kWh)
Cualquier cargo recurrente, como tarifas de uso base o mínimo
Duración del contrato y cargos por cancelación anticipada
Contenido de energía renovable
El EFL es su mejor herramienta para comparar planes uno al lado del otro.
Los planes de Texas generalmente se dividen en tres categorías:
Tasa fijaPagas la misma tarifa por cada kWh consumido durante la vigencia de tu contrato. Estos planes ofrecen previsibilidad.
Tasa variableSu tarifa puede cambiar mensualmente. Estos planes pueden ofrecer ahorros a corto plazo, pero conllevan mayor riesgo.
Tiempo de usoLos precios varían según el horario de consumo de electricidad. Estos planes recompensan el cambio de consumo a horas valle, lo cual resulta conveniente para ciertos hogares.
Cada uno tiene sus pros y sus contras. La clave está en adaptar tus hábitos de uso al tipo de plan.
Buscar:
Cargos base mensuales
Requisitos mínimos de uso
Créditos de factura que solo se aplican en ciertos umbrales de uso
Cargos adicionales por facturas impresas o métodos de pago
Estos extras pueden afectar su costo real por kWh más de lo esperado.
Los contratos de electricidad en Texas a menudo incluyen:
Duración del contratoLos plazos comunes son 6, 12 o 24 meses. Piensa en cuánto tiempo permanecerás en tu vivienda actual y cuánta estabilidad en la tasa de interés deseas.
Tarifas de terminaciónCancelar un contrato antes de tiempo puede generar cargos. Algunos proveedores no aplican estos cargos si te mudas, pero no siempre.
Renovaciones automáticas:Cuando finalice su contrato, es posible que lo cambien a un plan mes a mes con una tarifa más alta, a menos que elija uno nuevo.
Marque la fecha de finalización de su contrato en su calendario para que tenga tiempo de revisar sus opciones antes de la renovación.
Más allá de las tarifas y comisiones, conviene analizar el historial del proveedor. Una tarifa baja no sirve de mucho si el proceso de facturación es confuso o el servicio de atención al cliente es difícil de contactar.
Considerar:
Reseñas de clientes verificadas
Registros de quejas ante la Comisión de Servicios Públicos de Texas
Herramientas ofrecidas para ayudar a rastrear el uso y la facturación
Si la facturación es clara y consistente
Si tiene preferencias específicas, como facturación sin papel o soporte bilingüe, asegúrese de que esas funciones estén disponibles.
Ahorrar dinero importa, pero elegir un proveedor también implica tranquilidad. Piensa en:
Cómo se ajusta su uso al modelo de precios
Ya sea que prefieras un contrato fijo o flexible
Si quieres que tu energía provenga de fuentes renovables
Si el proveedor se comunica con claridad y facilita las cosas.
Un buen ajuste significa menos sorpresas y más confianza en su elección.
Una vez que entiendes qué buscar, estarás mejor preparado para evitar planes que parecen baratos al principio pero que cuestan más con el tiempo.